NO CUELGUES LAS ZAPATILLAS...
Alguna vez te has sentido con ganas de COLGAR LAS ZAPATILLAS!!! A que me refiero con esto… en nuestra vida ministerial pasamos por varias etapas, cada una de estas nos van confirmando mas y mas nuestro llamamiento. Sin embargo a veces nos dan ganas de dejarlo todo!!! ¿Te ha pasado?!!!
Recuerdo ya hace años era la directora de artes de la iglesia donde nací en Cristo y al mismo tiempo también era una de las líderes de Jóvenes… El Trabajo había aumentado en gran manera en ambos ministerios, los grupos crecían y se multiplicaban y Dios me hablo de llamado y enfoque. Aunque mi corazón, mis emociones estaban con los Jóvenes y eran mi pasión, y mi primera opción era “Colgar las zapatillas de Danza” y hacer lo que mi corazón me pedía, Dios no pensaba de la misma forma….
Así que antes de tomar una decisión basada en mis emociones, me puse en oración y ayuno para que Dios me hablara y entonces hacer lo que El me decía.
Aunque con todo mi corazón yo quería estar con jóvenes, Dios ya había tomado una decisión con mi vida y con mi asignación, así que tenia que permanecer en el ministerio de Danza. No fue fácil pero mi obediencia rindió muchos frutos hasta el día de hoy.
A veces el corazón, las emociones son engañosas, en mi vida ministerial he aprendido a base de errores y a base de paciencia ya que cualquier paso que yo deba de dar, debe ser conforme a Su voluntad. Es decir, quizá en nuestra vida nos enfrentemos con muchas circunstancias, actividades, quizá en la escuela, en el trabajo, en la casa. Nos podemos agotar, sufrir carencias financieras, pero algo es seguro, es necesario no dejarnos llevar por distracciones, por dudas, y aun por el corazón.
Cuantas veces yo he tomado la decisión de obedecer a Dios aunque no me guste!!!! Demasiadas!!! Pero cuando miro hacia atrás no cambiaría por nada todo lo que Dios ha hecho en mi vida y a través de ella.
Mi consejo es… aun en los momentos más difíciles que has tenido en el ministerio, aun cuando te hayas sentido ofendida(o), aun cuando no tengas finanzas para sustentar tu estadía, aun cuando te sientas desanimada(o) y con tus energías hasta el suelo, aun cuando tus emociones y tu corazón estén mirando a otro lado… Mira a Dios y pregúntale… Que es lo que quieres que yo haga??? … porque si es tu llamado y tu asignación es mejor que “NO CUELGUES LAS ZAPATILLAS”
Elizabeth Romero
Dancing for the Lord México
